“Los Vecinos de arriba” el riesgo exitoso de Odinofilia Fest
Espectáculos martes 15, Ene 2019- La obra se presentó por primera vez en México gracias a la unión de fuerzas entre Odín Dupeyron y Mejor Teatro de Morris Gilbert
Arturo Arellano
Para la segunda jornada de Odinofilia Fest, se realizó el estreno de “Los Vecinos de arriba”, puesta en escena autoría de Cesc Gay y en su versión mexicana dirigida por Odín Dupeyron, quien en complicidad de Mejor Teatro de Morris Gilbert, logra traer el montaje a nuestro país. Para esta celebración el Auditorio Nacional tuvo muy buena respuesta, dado que Odín ya tenía experiencias previas con el estreno de “Lucas” en el mismo escenario algunos años atrás.
“Los Vecinos de arriba” del cineasta y guionista español Cesc Gay, narra la historia de dos parejas muy distintas en su modo de proceder sus relaciones, Ana y Julio, una pareja cuya relación está en decadencia y por otro lado Laura y Salvador, quienes no podrían estar en mejor momento de su noviazgo. Estas parejas tienen un encuentro en uno de los departamentos de donde son vecinos, para conocerse y tratar algunos temas penosos para ambas partes, sin embargo la charla se torna densa y va de lo irreverente a lo reflexivo, dando como resultado risas incomodas, pero al final un gran mensaje.
Los protagonistas de esta versión son Andrea Noli, Luz María Zetina, Christian Ramos y el mismo Odín Dupeyron, quien da vida Julio, personaje al que se le podría definir como el rey del sarcasmo, puesto que de una manera genial se vale de este recurso, para salir bien librado de cada situación, que al final es un mensaje muy fuerte, sobre cómo podemos estar destruyendo a una persona, en este caso la pareja de una manera sutil pero eficaz y casi imperceptible.
La obra transcurre entre risas, unas plenas, otras tantas discretas por lo fuerte del texto, pero todas honestas, pues al principio el texto es muy liberal de alguna manera, tratando temas como las parejas swinger, orgias, sexo grupal, relaciones sexuales anales y demás tabúes que se ponen sobre la mesa, pero no de manera vanal, pues se podría leer como una herramienta para bajar la guardia del público y entonces pasar de golpe a la seriedad de los problemas que pueden llegar con la falta de comunicación entre las parejas y como una pareja entre comillas liberal puede ser más estable que una conservadora, por difícil que pareciera el asunto.
A final de cuentas no se juzgan gustos ni preferencias, mucho menos se inclina el texto a dar favoritísimo a lo liberal o lo conservador, sino a clavar un mensaje de que sea cual sea tu manera de vivir una relación de pareja en el tema sexual, lo que prevalece siempre es el amor, el respeto y las ganas de ser felices ante cualquier circunstancia.
Al término de la función, Dupeyron dijo “Estos son Los vecinos de arriba, es una obra que vi en Argentina, me encantó lo qué dice y quería venir a decirlo a México. Me arme de un equipo de amigos, soldados que han estado hombro con hombro, aguantando la dirección qué tengo que es terrible y me hacen berrinche los cabrones, pero a final de cuentas logramos buenos resultados. Esto es un estreno, así que agradezco a la gente de mejor teatro, porque los derechos de la obra los tenían ellos y finalmente Morris Gilbert decidió que la hiciéramos juntos”. Sobre su presencia en Auditorio Nacional refirió “Amo el teatro en corto, pero recintos como este es vivir el teatro como se vivía antes, con miles de personas atentas a lo que se dice. El sentimiento es diferente, la emoción de tanta gente reunida te llena el corazón”, concluyó.